TIEMPO La proporcionalidad y el equilibrio son dos factores claves para que la distribución del dormitorio sea un éxito con independencia del tamaño que tenga o de si se trata de una habitación juvenil, infantil o de matrimonio.
Optimizar todas las alternativas tiene que ver -y mucho- con la tarea de resolver cómo distribuir los muebles en la habitación. Hay quienes sueñan con convertir el dormitorio en una auténtica suite con zona de vestidor. Otros buscan la manera de incorporar al diseño de la estancia un escritorio para poder atender las jornadas de teletrabajo. Incluso, los hay que aprovechan cada centímetro para garantizar el orden del conjunto del hogar. Con independencia de cuál sea el escenario, lo cierto es que los muebles (y su organización) serán quienes determinen hasta dónde podemos cumplir nuestros deseos.
Cómo distribuir los muebles en una habitación es una duda recurrente. Pensar en el hogar es pensar en confort e intimidad, pero también en funcionalidad y orden. Dentro de la casa, la habitación que mejor encarna todas esas señas de identidad es el dormitorio. No en vano, su carácter práctico va más allá de ofrecer un espacio en el que retirarse a descansar. Sus dimensiones, formas y orientación son piezas claves a la hora de sacar el máximo partido a una estancia que, en todo caso, debe resultar inspiradora.
Desde este punto de vista, aparecen las dudas sobre cuál es la mejor distribución de los muebles. La cuestión no es baladí ya que del éxito de la tarea dependerá, en buena medida, su capacidad de crear una atmósfera personal que invite al descanso o el aprovechamiento de la luz natural. Y es que no es lo mismo abordar la distribución de una habitación juvenil rectangular o un dormitorio pequeño, que hacer lo propio con una habitación de matrimonio cuadrado, por ejemplo. Sin embargo, existen ciertas premisas básicas que pueden aplicarse en todos los casos para que el resultado sea un éxito.
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Cómo distribuir tu habitación con éxito
Cada habitación es un mundo, no en vano, el dormitorio constituye nuestro universo particular. Pero a la hora de hablar de cómo distribuir los muebles en una habitación, los protagonistas suelen ser siempre los mismos. Cama, mesillas de noche, baldas, armarios… Todos ellos han de ocupar su lugar para alcanzar la armonía del conjunto pero, ¿cómo conseguirlo? Aquí van algunos consejos básicos que puedes aplicar de modo sencillo y eficaz:
Planifica
Puede que te resulte tentador encargar esa enorme cama en la que dormir será seguro un placer. Tal vez caigas rendido a los encantos de un amplio armario en el que todas tus pertenencias estarán perfectamente organizadas. O puede que hayas encontrado el sinfonier con el que llevabas soñando años. Sin embargo, antes de sacar la tarjeta y ponerte a comprar debes planificar.
Analizar las posibilidades del dormitorio es fundamental. Para que la distribución de los muebles se ajuste a las mismas es interesante que dibujes un plano, tomes medidas y no olvides incorporar elementos tales como puertas, ventanas, vigas, radiadores o cualquier otro componente de la arquitectura interior de la habitación.
Solo así podrás empezar a planificar dónde colocar cada pieza, si tienes espacio suficiente para todas las que tenías en mente o si puedes reubicar alguna ya existente. Esta fase será, sin duda, la más creativa para dar con la mejor solución para la distribución del dormitorio.
La distribución del dormitorio ideal
Con el croquis de tu habitación sobre la mesa te será más fácil visualizar las opciones. En todo caso, debes tener presente que elijas la fórmula que elijas, la colocación de los muebles debe garantizar el movimiento en el interior de la estancia. Los expertos recomiendan situar la cama en el centro de un círculo imaginario de unos 2,60 metros.
A ambos lados deberías tener, al menos, 60 centímetros para poder moverte con facilidad y, en todo caso, habrás de respetar una distancia de un metro aproximadamente hasta el armario para poder abrirlo con facilidad. Si las dimensiones no permiten que la distribución del dormitorio respete estas medidas, tal vez debas recurrir a puertas correderas para el armario o prescindir de elementos como mesitas de noche, cómodas o similares.
Dónde colocar la cama
Hay diferentes puntos de vista a la hora de resolver esta cuestión aunque la mayoría coincide en apostar por ubicarla en paralelo o frente a la ventana de modo que las vistas propicien una mayor sensación de amplitud visual. Esta ubicación sirve tanto para la distribución de un dormitorio rectangular como para habitaciones cuadradas, grandes o pequeñas.
En todo caso, la superficie también puede darte pistas de cómo distribuir muebles en una habitación. Si hablamos de la cama, por ejemplo, en un dormitorio grande puedes colocarla alejada de la pared y aprovecharla como elemento diferenciador de ambientes. ¿Por qué no crear detrás de ella un práctico vestidor? Por el contrario, si hablamos de habitaciones pequeñas, mejor practicar el minimalismo para no crear sensación de agobio.
Mesillas y soluciones de almacenamiento
El orden es un aspecto clave en cualquier estancia de la casa pero resulta aún más relevante en el dormitorio. Tener todo perfectamente organizado te ayudará a propiciar la sensación de relajación por lo que no está de más contar con soluciones de almacenamiento suficientes que acompañen al armario.
Si no tienes mucho espacio puedes apostar por un canapé o muebles a medida que te ayuden a sacar el máximo partido a cada rincón. Las mesillas de noche también pueden contribuir a esta tarea aunque no olvides que nunca deberían superar la altura del colchón para no perder su esencia. Las baldas son una alternativa factible a las mesillas tradicionales que, flanqueando la cama, pueden incluso hacer de cabecero.
Juegos visuales y más
Además de la estancia principal es posible que te estés planteando cuál es la mejor distribución para una habitación juvenil rectangular o para el cuarto del bebé. Sea cual sea el escenario, recuerda que la clave está en garantizar la libertad de movimientos, no saturar el ambiente y planificar a conciencia.
Jugar con la percepción también te ayudará a colocar tus muebles y, más allá de los colores claros o el uso de espejos, una buena fórmula de mejorar la sensación de amplitud visual es dejar libres de muebles dos terceras partes de las paredes.
Por qué es importante la distribución del dormitorio
Tradicionalmente el dormitorio ha sido la estancia de la casa reservada al descanso. No obstante, cada estancia de la casa puede ser mucho más y el dormitorio no es una excepción. No importa si hablamos de espacios amplios o de pequeñas dimensiones. Unos y otros están llamados a convertirse en epicentros de la relajación, aunque ello no impide explorar todas sus posibilidades.
Optimizar todas las alternativas tiene que ver -y mucho- con la tarea de resolver cómo distribuir los muebles en la habitación. Hay quienes sueñan con convertir el dormitorio en una auténtica suite con zona de vestidor. Otros buscan la manera de incorporar al diseño de la estancia un escritorio para poder atender las jornadas de teletrabajo. Incluso, los hay que aprovechan cada centímetro para garantizar el orden del conjunto del hogar. Con independencia de cuál sea el escenario, lo cierto es que los muebles (y su organización) serán quienes determinen hasta dónde podemos cumplir nuestros deseos.
