Con anterioridad, en Culmia te hemos hablado de la Inteligencia Artificial (IA) y de sus posibles aplicaciones para el sector inmobiliario. Pero esta es una tecnología tan actual y relevante que hoy queremos volver sobre ella para centrarnos en su capacidad para mejorar los procesos relacionados con la gestión inmobiliaria.
En concreto, en las siguientes líneas te vamos a contar cómo las empresas y profesionales que prestan servicios inmobiliarios basados en la mediación, el asesoramiento y la ejecución de actividades relacionadas pueden potenciar su trabajo con la ayuda de la Inteligencia Artificial. ¿Qué te parece, nos acompañas?
Al igual que las compañías que trabajan en otros sectores y ámbitos, las empresas dedicadas a la gestión de bienes inmuebles tienen poderosas razones para implementar soluciones de Inteligencia Artificial en sus actividades cotidianas. En concreto, esta tecnología puede ayudarlas a:
Entrando más en detalle, a continuación exploramos una serie de herramientas y aplicaciones de IA que son de gran valor para de la gestión inmobiliaria.
La Inteligencia Artificial es una gran noticia para la metodología BIM. Esta, también conocida como ‘Building Information Modeling’, ofrece un enfoque holístico para planificar, diseñar, construir y gestionar proyectos de construcción. Para ello, integra toda su información en un espacio digital al que tienen acceso los profesionales implicados, permitiéndoles trabajar y compartir todos los cambios en tiempo real.
Hablamos, por tanto, de un modelo que abarca toda la ejecución del proyecto e incluso su ciclo de vida; y que incorpora información variada, de tipo geométrico, de tiempo, de costes, ambiental y de mantenimiento. Así que es perfecto para aprovechar todo el potencial de la Inteligencia Artificial y, de esta forma, mejorar su capacidad para:
Todo ello sin olvidar, además, que los profesionales del sector inmobiliario también podrán predecir y simular el rendimiento del edificio durante su vida útil, para conocer aspectos relevantes, como su rendimiento energético en determinadas situaciones, la mejor forma de aprovechar sus características sostenibles o la detección de riesgos.
Las inmobiliarias pueden ofrecer un servicio de atención 24/7/365 a sus clientes a través de diferentes canales de comunicación, como las Redes Sociales, el correo electrónico o el teléfono. Además de contar con empleados humanos para que respondan en tiempo real, también pueden incorporar chatbots y asistentes virtuales para que se sitúen en primera línea y hagan una labor básica, consistente en responder a las preguntas más sencillas o derivar las más complejas a los agentes idóneos.
Gracias a la IA, los sistemas más modernos están logrando grandes avances utilizando Procesamientos de Lenguaje Natural (PLN). Estos analizan conversaciones ya existentes de forma automática y aprenden para cada vez ser más precisos y tener la capacidad no solo de interpretar las intenciones de sus interlocutores humanos, sino también de anticiparse a sus necesidades.
Así, estas herramientas pueden ser muy útiles para resolver preguntas de los usuarios, recoger y gestionar quejas o incidencias, programar citas o filtrar los mensajes para que se hagan cargo de ellos los trabajadores más cualificados.
Las inmobiliarias necesitan estar al día de las últimas novedades que se producen en el mercado inmobiliario para ofrecer los precios más competitivos a sus clientes y descubrir las mejores oportunidades de inversión. Sin embargo, esta es una tarea particularmente compleja, porque requiere no solo abarcar una enorme cantidad de datos e información, sino también tener la capacidad para analizarlos y para entenderlos.
En este blog ya te hemos detallado también qué es el Big Data y sus aplicaciones para el sector de los bienes inmuebles. Pues bien, ahora destacamos las ventajas de combinarlo con la IA para facilitar los procesos de analítica del sector; ya que permite ejecutarlos de forma autónoma y ofrece orientación a los profesionales para que interpreten correctamente esta información, puedan detectar patrones y tendencias y tomen sus decisiones de forma argumentada.
El sector inmobiliario gestiona contratos extensos y complejos que incluyen diferentes cláusulas. Por ello, los agentes deben hacer un seguimiento constante de estos para verificar su cumplimiento. Pero recientemente, mediante la tecnología blockchain y gracias a las posibilidades de la IA, es posible crear contratos inteligentes o smart contracts que tengan la capacidad de ejecutarse automáticamente, una vez que el sistema compruebe que se cumplen las condiciones establecidas en el mismo.
Esto, además de simplificar las operaciones y liberar de trabajo a las partes implicadas en los contratos, también ofrece una capa extra de seguridad a todos los procesos involucrados. Fundamentalmente, porque la tecnología blockchain encripta la información en diversos paquetes de datos, y luego los reparte a través de los numerosos nodos que conforman sus sistema. Por lo que estos contratos se conservan de forma descentralizada y es muy difícil que puedan ser comprometidos por los ciberdelincuentes.
Desde el punto de vista de la mercadotecnia, la IA en la gestión inmobiliaria posibilita la creación de anuncios publicitarios a medida y la hiperpersonalización de sus mensajes de marketing. Las empresas pueden afinar considerablemente sus estrategias para dirigir campañas y promociones a segmentos concretos de su público objetivo, así como incrementar el volumen y la creatividad de sus artículos, documentos y demás contenidos para favorecer el embudo de conversión de su negocio.
El sector inmobiliario es consciente de la importancia que tiene para su actividad la visualización de las propiedades. Su objetivo es facilitar la máxima de información visual posible para que sus potenciales compradores puedan visitar sus inmuebles (a la venta o en alquiler) sin desplazarse hasta ellos, por lo que las empresas del sector pueden utilizar herramientas de IA para crear tours virtuales y planos 3D a partir de imágenes o vídeos ya existentes.
Además, la IA en la gestión inmobiliaria también puede destinarse al retoque de imágenes o incluso a la creación de modelos renderizados en 2D/3D de proyectos de obras o reformas que todavía no se han llevado a cabo. De esta manera, se pueden obtener recreaciones muy realistas de los resultados que se esperan conseguir, lo que resulta muy útil tanto para el arquitecto, diseñador o reformista, como para el cliente, dado que este último podrá ver con antelación cómo quedará la vivienda en el futuro.
Las que acabamos de ver son solo algunas de las numerosas aplicaciones que tiene la IA en la gestión inmobiliaria. Sin embargo, aún estamos lejos de adivinar todo el potencial de esta tecnología para el sector, porque se calcula que la inversión en ella pasará de 164 960 millones de dólares en 2023 a 731 590 millones de dólares en 2028, a una tasa de crecimiento anual compuesto del 34 %.
A medida que las empresas inmobiliarias descubran sus ventajas, irán implementando sus soluciones en más procesos. Por lo que es de esperar que aspectos como la seguridad, la personalización de los servicios, la construcción y la gestión automatizada de los inmuebles, los análisis de datos o la capacidad predictiva experimenten avances muy positivos a corto y medio plazo.
Te recomendamos:
Si estás buscando crear un ambiente acogedor y relajante en tu hogar, la decoración rústica…
Hacer predicciones en el mercado inmobiliario no es sencillo, porque está condicionado por factores sociales,…
‘Comisiones’ es una palabra habitual cuando hablamos de una hipoteca, porque normalmente las entidades bancarias…
Mudarse de vivienda es sinónimo de un aluvión de cambios. No solo personales y materiales,…
En los últimos años, la autogeneración de energía en el ámbito doméstico se ha convertido…