El orden en casa es universal, ya que no tiene nacionalidad. Por eso, y aunque en los últimos años las corrientes asiáticas (y, más en concreto, orientales) han sido las auténticas reinas a la hora de plantear estrategias domésticas, en Europa también contamos con alternativas muy interesantes para hacernos la vida más fácil.
Una de las más populares es la que se conoce como método BISOU. De ella queremos hablarte hoy, para acercarte sus principios y contarte cómo puedes aplicarla en tu día a día en el hogar.
Se trata de un sistema para la ordenación del hogar que recibe este nombre por los cinco conceptos que lo sustentan. Así, estos se denominan en francés: besoin (necesidad), immédiateté (inmediatez), semblable (similitud), origine (origen) y utile (utilidad). Más adelante entraremos en detalles en cada uno de ellos, pero podemos indicar que esta metodología trata de ayudarnos a alcanzar al orden a la vez que nos conciencia para adquirir unos hábitos de vida sostenibles y de consumos responsables.
No hay que irse muy lejos para encontrar el origen de esta corriente. En concreto, al año 2015, cuando sus dos creadoras, las autoras francesas Marie Duboin y Herveline Giraudeau, crearon el grupo de Facebook ‘Gestión presupuestaria, ayuda mutua y minimalismo’. Además, la primera tiene su propio blog sobre consumo responsable ‘La Salade à Tout’; mientras que la segunda también publica sobre iniciativas medioambientales y sociales en su propio espacio, ‘Sortez de voz conapts’.
Su grupo conjunto en la mencionada red social tuvo un enorme éxito, lo que las llevó a emprender juntas proyectos de mayor envergadura, como sus libros ‘Deja de consumir en exceso’ y ‘El consumo responsable te hace feliz’. Y fruto de estos proyectos surgió el método BISOU, una manera estupenda de unificar sus propuestas y de enseñar el camino a miles de personas para que puedan mantener el orden en casa de una forma sencilla y accesible.
Si bien este sistema es útil para ordenar y organizar nuestra casa, de inicio está claramente orientado a ayudarnos con nuestro armario o vestidor. Y es que la ropa es una parte importante de su filosofía, porque, tal y como recuerdan sus creadoras, “cada año se tiran en Europa hasta cuatro millones de toneladas de ropa nueva”.
Un problema que entienden que se debe al consumo irresponsable de muchas personas, quienes compran por impulso y luego no encuentran el momento de ponerse esas prendas nuevas. De ahí que, tras ocupar espacio de nuestra casa de forma innecesaria, suelan acabar en la basura.
De esta forma, concienciarnos sobre esta circunstancia es el primer paso para asimilar el método BISOU y ponerlo en práctica. Todo para que seamos más responsables a la hora de comprar, lo que nos ayudará a cambiar nuestros hábitos de consumo y, por tanto, a cuidar el medio ambiente y a mantener mejor el orden de nuestra casa.
Al igual que ocurre con el método KonMari, el sistema BISOU se sustenta en varios pilares. En concreto, en 5 preguntas que podemos formular a partir de los términos franceses de los que antes te hemos hablado.
Es posible que, en ocasiones, al visitar una tienda sintamos el impulso de comprar una prenda u objeto. Y detrás de este pensamiento puede haber una necesidad evidente, ya que el producto nos haga verdadera falta; o simplemente una tendencia consumista que nos anime a hacernos con ello para obtener una satisfacción por el simple hecho de adquirir aquello que nos gusta o nos ha llamado la atención.
Lógicamente, el método BISOU nos recomienda aprender a controlar esos impulsos y a preguntarnos si realmente vamos a utilizar aquello que estamos planteándonos comprar. Por lo que, si no hay una necesidad evidente de tenerlo, el siguiente paso tiene que ser sencillo de dar: rechazar la idea y guardar nuestra cartera.
Normalmente, detrás de una compra planificada hay una necesidad. Pero esto no sucede en las denominadas compras por impulso, aquellas en las que vemos en una tienda algo que nos llama la atención y tomamos la decisión inmediata de adquirirlo.
Según un reciente estudio de la OCU, el 44 % de los consumidores españoles hace compras por impulso, el 26 % incluso adquiere cosas que realmente no necesita y el 25 % se hace con productos que no planeaba comprar.
En no pocos de los casos, quienes comprar por un impulso lamentan esta decisión inicial. Por eso, el método BISOU aconseja tener la mente fría y no caer en la ‘tentación’, para tener tiempo para reflexionar y valorar si realmente es preciso que compremos aquí y ahora el producto. Fundamentalmente, porque probablemente este tiempo que nos demos para tomar la decisión nos ayude a acertar.
Aunque nos guste lo que estamos viendo en la tienda, esta pregunta puede ayudarnos a aclarar la utilidad que tendrá para nosotros su compra. Si, por ejemplo, tenemos una prenda parecida o que cumpla con una función similar, probablemente no nos merezca la pena hacernos con ella, ya que no la usaremos mucho. Lo que nos llevará a acumular cada vez más ropa en el armario y, por tanto, a la larga nos obligará a hacer limpieza para ordenar el espacio que tenemos.
Dado que el método BISOU se basa en unos principios de sostenibilidad y de respeto hacia el medio ambiente, también nos propone que seamos cuidadosos en nuestras compras. En este sentido, la utilidad o estética del producto no deben ser los únicos aspectos que deberemos tener en cuenta para tomar la decisión, sino también movernos por otros detalles, como los métodos utilizados para su producción, sus componentes o el coste medioambiental que han tenido su creación y posterior venta.
Para hacer todo esto más fácil, podemos optar por productos con etiqueta eco-friendly, ya que esta nos asegurará que se han utilizado tanto materiales como procesos sostenibles para hacerlos llegar a nuestras manos.
Este punto es precisamente el que ‘hermana’ el método BISOU con el KonMari. Ambos nos recomiendan aplicar unos principios de minimalismo para quedarnos solo con aquello que realmente vayamos a utilizar en nuestra vida. Algo importante no solo para poder aprovechar todo lo que tenemos, sino también para luego poder ordenar y organizar mejor nuestra casa, como nuestro armario. Básicamente porque, si lo cumplimos a rajatabla, luego no tendremos que hacer excesiva limpieza.
En resumen: el método BISOU no nos dice cómo ‘activarnos’ para ordenar nuestra casa ni nos da ideas para organizar el armario. En su lugar, nos pone muy fáciles las cosas para que lo hagamos. Porque si consumimos de forma responsable y desde una perspectiva sostenible, viviremos con lo necesario, evitaremos acumular y, por lo tanto, no necesitaremos hacer un gran esfuerzo para disfrutar de un entorno equilibrado.
¿Qué te parece? ¿Te animas a poner en práctica el método BISOU?
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